17 abr 2011

La Suisse del Hatillo

De las "pocas buenas" opciones gastronómicas que aún quedan en el hatillo, me atrevo a sugerir La Suisse, ubicada en el 5to. Piso de C.C. Paseo El Hatillo. No sé si opinen igual que yo  pero hace mucho el pueblo perdió su buena mesa y aun así, sus vecinos (me incluyo) insistimos en comer por el sector a sabiendas que las opciones son cada vez más reducidas.

El Fondue Bourguinone (Bs. F. 250) de La Suisse acompañado de un vino tinto es una alternativa segura.  Me gustan el Fondue, así que si comparten este gusto les gustará el lugar porque además tiene una vista muy agradable.  Especialmente al sentarse en las mesas que están junto a las ventanas para ver caer la noche lo cual puede resultar muy seductor con buena compañía y vino. Si es una tarde de lluvia aprovechen los asientos  de primera fila, será especial. De Postres recomiendo su especial Fondue de Chocolate Toblerone y supongo que la Textura de Pasión de Chocolate (Bs. F. 80) le gustaría a cualquier amante del cacao.

Mi crítica:
Lugar: Bueno
Servicio: Bueno
Gastronomía: Bueno
Relación Precio/Valor: Regular. 
Del 1 al 10: 8
Lo recomiendo

Las Cenas de EM en La Isabela

Apreciados Gourmets, descubrir la cocina de Eduardo Moreno exige repetir la experiencia una y otra vez.  Por lo menos yo, que la he vivido varias veces les aseguro que después de la primera querrán volver. En nuestra Ruta Gastronómica pisamos de nuevo La Isabela para adentrarnos y degustar una de las tantas cenas del reconocido Chef, quien desde su propia cocina mezcla los mejores ingredientes y sabores lo cual se traduce en una amplia y variada oferta de sugerencias culinarias para chuparse los dedos.



Esta vez el menú prometía desde que nos llego por e-mail, honestamente es imposible no dejarse tentar cuando lees algo así: “Abrebocas: Reina Pepeada de Langosta. Oreo de plátano rellena de crema de caraota.  Empanaditas de cazón y manzana con guasacaca”… Se lee delicioso verdad? Pues lo es y fue solo el comienzo de una grata velada en La Isabela.

Sorprendente la Oreo de Plátano, aunque al principio de mi comentario muchos arruguen la cara les aseguro que al probarlo es un manjar de dioses.  Imaginen un pastelito crujiente relleno de caraotas endulzado con polvo de galleta oreo: Lo punteo 10/10.

Después de aquella apertura Lucho mi compañero inseparable de Ruta cuyo gusto por la gastronomía, el vino y la conversa es igual al mío, fue seducido por el Cruzado de Mero y foie gras con parisién de apio, zanahoria, ñame, plátano verde y julianas de compuesto, seguido de un Bollo Pelón relleno de Cochino. Hasta aquí todo extraordinario pero ambos coincidimos que el plato principal fue donde se lució el chef. 

La mejor fotografía que dejo en este post y con la cual encabezo esta nota, pertenece a un Pisillo de Cordero con emulsión de plátano maduro y queso guayanés de búfala.  Fue un verdadero broche de oro, aunque de postre sirvieron un Helado de Golfeado que seguro complació a muchos, siendo honesta con el chef, no era el postre que hubiera querido probar después de aquel delicioso Pisillo de Cordero pero estuvo bueno.

Si te preguntas cuál es el costo de esta experiencia: Bs. F. 450 por comensal, no cobran el descorche y puedes llevar lo que desees tomar.

Mi crítica:
Lugar: Muy bueno
Servicio: Muy bueno
Gastronomía: Muy bueno
Relación Precio/Valor: Bueno
Del 1 al 10: 9
Lo recomiendo